En este espacio se habla de viajes, aventuras, motocicletas, supervivencia, vida en la naturaleza, forja de cuchillos, trabajos en acero y artesanías en cuero.
Adiós asas de plástico que no toleran las llamas del fuego. 2 remaches, una chapita de acero reciclada de un termo abollado, una antigua percha y....
También hice luego unas perforaciones laterales para pasar un cable de freno de bicicleta a fin de obtener una manera de colgar el jarro. Recorté un poco de acero inoxidable de una chapa y construí una tapa para que el agua demore menos en hervir
El domingo pasado fui al polígono de tiro y junté algunos cartuchos disparados. Se me ocurrió hacer algunos contenedores útiles para regalar. En ellos se puede poner desde un KIT de costura, pesca, condimentos, en el pequeño pueden ir pastillas purificadoras de agua, Yesca, etc.
Espero les guste.
Adiós a la lata de picadillo! Hice la versión de lujo de mi probadísimo calentador a alcohol. Con él preparé alimentos a 5000 metros de altura y hasta cociné en un disco de arado bajo lluvia. No precisa precalentamiento, consume un dedo de alcohol para hervir un litro y no tiene mecanismo complejos que puedan dañarse. El orificio aliviador es elemental para que no levanté presión. De otro modo el alcohol rebalsa provocando un incendio. Precaución los menores si experimentan que sea en presencia de un adulto responsable. Mi Cólleman queda para salidas en vehículo y con familia.
Básicamente es un tubo dentro de un recipiente metálico. El tubo tiene en el borde inferior tres o cuatro rebajes para que el combustible que se surte por la boca pase fuera del tubo y moje la mecha de lana de vidrio en cinta. Es la que se usa alrededor de los caños de escape. También funciona con lana de vidrio común. Estos materiales no se queman. El otro punto clave es hacer un orificio en el borde superior para que la presión al apoyar la olla, jarro o pava no haga salir el alcohol provocando un incendio.
Les dejo desarmado el que usaba antes que estaba hecho con latas.
Usado en el siglo 17 este artilugio nos ahorra el paso de carbonizar nuestra tela, pues simplemente funciona parecido a un yesquero. La mecha de algodón se introduce y se quema sólo un extremo, se colocan ambas tapas y ante la ausencia de oxígeno ya queda esa punta carbonizada. Luego si se desea encender una hoguera sólo hay que destapar los extremos, empujar la mecha de Mané que asome el carbón y soltar allí nuestra chispa.
El mío encendió al primer golpe. Hay que sostener la piedra y el tubo con la misma mano y la libre es la que da el golpe. Más abajo les dejo el enlace de Instagram para que puedan ver el vídeo.
Por favor nadie le diga a mi esposa de donde saqué el algodón para la mecha.